EL COMEDOR DEL PUEBLO
Es justo iniciar esta reseña mencionando que Víctor Raúl Haya de la Torre, fue el creador y el principal sostén del Comedor del Pueblo.
Su convicción y conocimiento acerca de lo que necesitaba el pueblo para su desarrollo y progreso, lo llevaron a confiar en un proyecto que fuera el símbolo de una alimentación de calidad para los más necesitados.
Víctor Raúl sostenía la necesidad que tenían los pueblos de contar con alimentación, vivienda, vestido, educación y servicios básicos; por lo que solo sería garantía de un buen gobierno, el partido político o movimiento que asumiera estos temas, como suyos.
En un recordado discurso dijo: “El pueblo necesita comer, y comer más barato, y no solamente comer en cantidad; necesita la calidad alimenticia que dictan los preceptos científicos de la nutrición contemporánea”. Esta frase no pudo ser más acertada.
Por intereses políticos, su idea de un comedor dedicado a la ciudadanía fue perseguida y amenazada. Alguna vez parafraseó: “Estos comedores son bienaventurados porque han sufrido persecución por la justicia”. Lo cierto es que el Comedor del Pueblo brindó, durante muchos años, un excelente servicio, alimentando diariamente a miles de peruanos, a un precio, inclusive, más bajo que el del propio Estado.
El Comedor del Pueblo, es una tradición y una muestra más del compromiso del aprismo y de su fundador con los más necesitados.
El Comedor del Pueblo, ubicado en diversas “Casas del Pueblo” a lo largo y ancho de la republica, tiene una sede principal ubicada en la avenida Alfonso Ugarte, en Lima, brindando un servicio económico y de calidad.
El menú es diverso, tratando siempre que la alimentación sea balanceada y nutritiva. Las opciones se incrementan y renuevan, buscando que el consumidor, aprista o no, encuentre una comida sana, agradable y accesíble a su presupuesto, dada la situación económica actual.